Mexicrónicas, de Finde por México
Un Palacio en la ciudad Respiro, inhalo hasta colmar mis pulmones para después exhalar, repito el ejercicio mientras observo el pavimento mojado, llovió durante la noche y ello hace que esta mañana sea fresca; inhalo y vuelvo a exhalar. Siento el viento ligero tocando mis brazos, disfruto esa rica sensación, nunca me había tomado la molestia de visitar este lugar a estas horas de la mañana y para registrar tal momento, volteo sólo para mirar que la torre latino marca las 7:43 de la mañana. Camino, lentamente apreciando su majestuosidad, esa que cada vez que paseo por aquí no me había detenido a admirar. Tan grande, tan bello, tan blanco, no por algo es un palacio, pero lo que hace honor a su nombre es además de su arquitectura, las bellezas que resguarda, el Palacio de Bellas Artes. Observo a mi alrededor, apenas vislumbro almas transitando por la zona, en su mayoría ocupados por llegar a sus destinos, será que después de décadas de erguido los citadinos hemos olvidado